Defiende el modelo presencial, ya sea de forma física o por videoconferencia
El presidente de Crue Universidades Españolas, José Carlos Gómez Villamandos, ha defendido este jueves que el objetivo es que ningún estudiante tenga que abandonar sus estudios como consecuencia de la COVID-19 y ha afirmado que, si es necesario, las universidades activarán un sistema de ayudas por causas sobrevenidas, como ya lo hicieron en la anterior crisis económica. En este sentido, ha subrayado que, para ello, es necesario que las instituciones universitarias reciban cuanto antes los 400 millones de euros del Fondo COVID del Gobierno. «Queremos que este fondo se distribuya en gran parte a las universidades, no solo para la adquisición de equipamiento, la formación del profesorado, las medidas higiénicas o las obras de acondicionamiento de las instalaciones, sino también para poner en marcha programas de becas y ayudas a los estudiantes por causas sobrevenidas. Ya lo hicimos en 2008 y, si podemos, lo volveremos a hacer», ha señalado Gómez Villamandos en la rueda de prensa posterior a la reunión con el ministro de Universidades, Manuel Castells, en la que ambos han abordado el inicio del curso académico 2020-2021, marcado por la pandemia del coronavirus.
El también rector de la Universidad de Córdoba ha afirmado que, aunque las universidades extremen las medidas sanitarias para ser espacios seguros, el riesgo cero no existe, y ha apelado a la responsabilidad individual de cada uno de los miembros de la comunidad universitaria para evitar los contagios. «Podemos ser un referente para la sociedad», ha aseverado.
El presidente de Crue ha destacado que las universidades «no van a renunciar» al modelo de docencia presencial y ha apuntado que este se puede garantizar con la combinación de presencia directa en el aula y videoconferencia. En este sentido, ha indicado que desde junio las universidades llevan trabajando en sus protocolos para garantizar una docencia de calidad en este escenario de pandemia y ha explicado que los alumnos del primer curso van a tener garantizada la mayor presencialidad directa posible, gracias a la conversión en aulas de distintos espacios dedicados hasta ahora a otros fines (salones de actos, gimnasios, entre otros) y al refuerzo de la actividad tutorial.
Gómez Villamandos ha señalado que para los rectores es también una «prioridad» el desarrollo de las prácticas académicas en las universidades, que se vio muy afectado el pasado curso, y ha insistido en la idea de que los docentes e investigadores se consideren personal esencial para que, en caso de confinamiento, tengan la posibilidad de ir a los laboratorios u otras instalaciones universitarias a desarrollar su actividad investigadora y a impartir enseñanza mediante videoconferencia.
El presidente de los rectores también ha manifestado en la rueda de prensa el interés de Crue Universidades Españolas por resolver temas que llevan años estancados. Gómez Villamandos recordó que está aún pendiente la revisión de los Reales Decretos de ordenación de enseñanzas universitarias y de regulación básica de los requisitos de creación y reconocimiento de las universidades y centros universitarios, así como el Estatuto del Personal Docente e Investigador, que se encuentra en fase de borrador, y que espera que se siga negociando con el Ministerio de Universidades y el de Ciencia e Innovación con el fin de que sea una herramienta que permita al Sistema Universitario Español, bajo los principios de igualdad, mérito y capacidad, diseñar sus políticas de personal con la flexibilidad que se requiere para competir con el resto de sistemas universitarios.